Las primas

Historia de iniciación ambientada en la década de 1940 que despliega el mundo tortuoso de una familia disfuncional de clase media baja de la ciudad de La Plata. A mitad de camino entre la autobiografía delirante y el ejercicio impúdico de la etnografía íntima. Las primas es una novela única y original, con una prosa que pone en peligro todas las convenciones del lenguaje literario.

Si la historia que cuenta esta impactante novela de Aurora Venturini transcurriera en Texas, seguramente habría en ella psicópatas asesinos, vísceras y sangre a raudales. No es el caso, por suerte para los lectores, pese a que en el seno de la familia que la protagoniza hay asesinos —y asesinatos—, prostitutas, encubridores, retrasadas mentales y una enana. También un profesor de bellas artes, una alumna aventajada y una madre profesora. 

Aura Venturini disecciona la sociedad de su juventud, en La Plata (Argentina) de los años cuarenta, una familia compuesta por mujeres y totalmente disfuncional que muestra una capacidad asombrosa para salir adelante, hasta el punto de que la protagonista consigue convertirse en pintora famosa. Yuna, la narradora, relata en primera persona los años de formación y superación personal, con un corrosivo sentido del humor y sin pelos en la lengua. 

Las primas supuso el descubrimiento y la consagración de su autora, a la edad de ochenta y cinco años: ciertamente, nunca es tarde si la novela es buena. En este caso es excelente.


(Copiado de Planeta de libros)


Empezar a leer



Aurora Venturini (La Plata, 1921-Buenos Aires, 2015) fue novelista, cuentista, poeta, traductora, docente y ensayista. Trabajó como asesora en el Instituto de Psicología y Reeducación del Menor, donde conoció a Eva Perón, de quien fue amiga íntima. Tras el golpe de Estado de 1955, se exilió en París. Allí compartió tertulias y noches de bohemia con personajes como Sartre, Simone de Beauvoir, Camus, Ionesco o Juliette Gréco. Escribió más de cuarenta libros. Pero fue en 2007, a los 85 años, cuando con Las primas consiguió el reconocimiento que hasta entonces se le había negado.


Comentarios